EL ALCORNOQUE GALÁCTICO ARREMETE DE NUEVO
¿Qué papel juega el Sr. Rodríguez Ibarra en la comedia: “A Andalucía ni agua”?


Cuando ya parecía que estábamos a salvo de los exabruptos del señor ése, extremeño él (disculpas a los extremeños), tan brutote, tan metidito en su papel de abuelote cebolleta, va y abre la boca de nuevo y, creo que hasta en casas negras del barro, la gente se queda atónita: ¿SOCIALISTA? ¡VAYA!

Al escuchar al señor Ibarra, presidente él de Extremadura, uno se queda sin poder respirar. ¿Qué busca este señor con estas declaraciones que dejan a su partido, PSOE, a los pies del PP? ¿Será una estrategia para rebajar de alguna manera este derecho histórico de los andaluces?, será esto lo que busca (?).

Si este señor es miembro de la ejecutiva de ese partido, que lo es, y en las ejecutivas de los partidos que practican la democracia se debate la política que luego se defiende en la calle, en el congreso, en el día a día. Yo me pregunto: ¿Por qué este señor sale en contra de unas reivindicaciones históricas del pueblo andaluz y de su propio partido, tal como es el control y gestión de la cuenca hidrográfica del Guadalquivir que discurre en un 98% por suelo de Andalucía?

Me cuesta creer que este hombre sea tan bruto, tan torpe y tan antisocialista. Más bien, creo que él juega su papel en el reparto de los señores barones del PSOE. Conozco la complicidad del señor Ibarra con su amigo y presidente del alma y de ejecutiva, señor Chaves, con el que intentó compartir “la mejor televisión del sur”, cosa que no llegó a cuajar, para alegría y suerte de los extremeños.

¿Es posible que una persona que se llama socialista pueda declarar que prefiere la gestión del Estado Central sobre la cuenca hidrográfica del Guadalquivir, antes que esta gestión caiga en manos de la Junta de Andalucía, en manos del PSOE desde la primera Junta Provisional del señor Fernández Viaga?

Yo recuerdo unas jornadas celebradas en Sevilla en el año 1999, en la Pablo Olavides, organizadas por la Consejería de Asuntos Sociales del PSOE, en la que me colé y participé. Fue una escuela de verano muy interesante; pero sobre todo me viene a la memoria que en uno de los debates en el que era ponente Jesús Caldera, hoy Ministro de Trabajo, yo sacaba una batería de reivindicaciones históricas que el PSOE, aun gobernando siempre en Andalucía con una mayoría muy cómoda, no había sido capaz de desarrollar. Cosa que yo les echaba en cara, y recuerdo perfectamente que cuando dije que, desde las primeras elecciones en el 77, el PSOE había siempre llevado y prometido en su programa la gestión y control de nuestra seña de identidad como era el río, nuestro río Guadalquivir; el señor Caldera, tan pancho él, me respondió exactamente lo que ahora sale denunciando el “alcornoque galáctico”: “Es que el río Guadalquivir no es netamente andaluz”. Ante la cara que se nos quedó a los que allí estábamos, rápidamente le soplaron por detrás, y el bueno de Caldera intentó arreglar lo que ya no tenía arreglo. Ello es por lo que ahora me da pie para argumentar que, estos exabruptos del abuelo cebolleta, es un plan de reparto de papeles, para rebajar aún más los derechos del pueblo andaluz.

Aunque la hospitalidad del pueblo andaluz es ancestral y se nos conozca mundialmente por ella; yo rompería por un momento, puntualmente, esta seña de identidad y pediría a mis paisanos que declarásemos a este señor Ibarra como persona non grata en Andalucía. Para mí, ya lo es.

Antonio Criado Barbero